¿Qué hay detrás de la importación de semillas de papa en Venezuela?

A la Fiscalía 12º del Ministerio Público contra la corrupción, llegó hace apenas unas semanas la denuncia que abre un proceso de investigación sobre la empresa importadora transnacional  Di Jenkins Ingham, encargada de realizar las gestiones de importación desde el puerto de Summerside, en Canadá, de semillas de papa para cosechar en tierras venezolanas.

¿Quién es la empresa Di Jenkins Ingham?

En realidad poco se conoce de la referida transnacional que según afirman directivos de la Federación de  Productores de Papa y Hortalizas (Fenaphort) tiene negocios desde hace tiempo atrás con el Gobierno venezolano.

Sin poseer una dirección jurídica, ni registro de identificación fiscal (RIF)  conocido en el país; además de contar con un representante jurídico en Venezuela,  ni una data de negociaciones conocidas, Di Jenkins Ingham se ha ganado la confianza del Ejecutivo Nacional, quien le ha otorgado a través de la estatal Agropatria, millonarias contrataciones para la importación de semillas, sin medir el daño que esto ha traído a la producción nacional.

“Desde que el Estado asumió la importación de semillas con la empresa Di Jenkins Ingham,  todos los años tenemos problemas con la semillas. Llegan en mal estado, contaminadas, tarde o sencillamente sucede como este año que no llegó a pesar que se pagó una cantidad importante de dinero y existe un remanente que no sabemos si la empresa lo devolvió al Estado, si fue debitado o sencillamente el dinero desapareció”, así lo aseguró Enmanuel Escalona, directivo de la Federación Nacional de Productores de Papa y Hortalizas y de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga).

Los productores de papa venezolanos, precisaron querer saber qué pasó con una negociación que permanentemente se ha ocultado a los paperos y que hoy los convierte, junto a los consumidores, en los principales afectados ante dicha transacción.

Producción nacional

La importación de semillas es vital para la producción de papa en Venezuela.Productores nacionales han desmitificado  los anuncios hechos por el Gobierno Nacional en donde se asegura que existe suficiente semilla para sembrar en el país.

“Es falso que en Venezuela los productores tengamos suficientes semillas para cubrir la demanda. En el país se depende de la semilla importada para poder renovar la genética o el germoplasma de la papa”, detalló Enmanuel Escalona.

Los productores hicieron un recuento de la manera en que ha venido decayendo la producción del tubérculo en el país y ratifican que hace cinco años se producían unas 600 mil toneladas de papa en Venezuela, cifra que hoy en día se ha reducido a 60 mil toneladas por año.

Indicaron que al menos dos kilos de papa se consumen por persona anualmente, cuando hace 30 años se tenía una ingesta de 30 kilos de papa al año, y hace cinco se estaba por el orden de los 20 kilos anuales por habitante.

Advirtió el representante de Fedenaga que de continuar la situación actual, para el año 2017 la papa podría desaparecer de los platos de los venezolanos.

“Pedimos la investigación, creyendo aún en la buena voluntad del Estado venezolano para resolver el problema de los productores y esperanzados en que la solución pudiera ser de manera inmediata para poder cumplir con los ciclos de siembra. Pero hasta la fecha no se tiene ninguna solución y lo único que nos han dicho es que no viene semilla de papa para Venezuela”.

“Un secreto muy bien guardado”

Se pudo conocer de fuentes cercanas a Agropatria que pidieron reserva de la identidad, que el contrato celebrado entre la referida empresa y representantes de  Di Jenkins Ingham, no lo conoce ni la asesora jurídica de la empresa estadal. “Y es posible que ni siquiera el Ministro de Agricultura y Tierras tenga información sobre el contenido del documento jurídico”.

Señalan que se trata de “un secreto muy bien guardado”;  al igual que el monto de la contratación, los términos en que se celebró, y cuánto dinero se habría pagado por concepto de comisiones y cuánto quedó.

De acuerdo a la fuente, la empresa en cuestión ya ha presentado en anteriores oportunidades, señalamientos que la involucran con el manejo poco claro de importaciones; como la llegada al país de contenedores vacíos que deberían traer herbicidas y empresas arroceras.

Será tarea del Ministerio Público, citar a declarar a los representante legales de Di Jenkins Ingham (aunque no se conocen en Venezuela), los cuales tienen la obligación de presentar el contrato que firmaron con el Estado venezolano para traer la semilla de papa al país.

Esta sería solo una de las 200 denuncias por corrupción en la que estaría envuelta la estatal Agropatria.

Para el análisis

3 mil familias que dependen de un cultivo que se desarrolla de manera artesanal en 10 mil hectáreas de los estados andinos están a punto de quiebra.

10 mil hectáreas sembradas generan un  rendimiento de 20 mil kilos por hectárea, se obtendrían 200 millones de toneladas de consumo en la región andina, a razón de 20 mil kilos por hectárea.

2 millones 500 mil dólares es el total del costo de la importación de semillas de papa que cubren la siembra de la región andina.

17 mil hectáreas se sembraban hace 10 años atrás; siembra que se ha reducido a 10 mil hectáreas por falta de semillas.

90% ha caído el consumo de papa en Venezuela, siendo uno de los platos que simplifica la alimentación por ser el cuarto rubro de consumo nacional.

70% de la producción de papa en la zona andina (Mérida, Táchira, Trujillo), queda comprometida por ausencia de  semillas. Es imposible ejecutar un plan de siembra nacional, si no hay dinero para la importación de semilla.

Consumo en 30 años de papa por habitante

• Hace 30 años se consumían 30 kilos de papa al año. Hace cinco se estaba por el orden de los 20 kilos anuales por habitante. Y en el 2016 se consumen dos kilos de papa anual por habitante.

Producción de papa en 5 años

•  Hace cinco años se producían unas 600.000 toneladas de papa en Venezuela, hoy se ha reducido a 60.000 toneladas por año.

Inversión en compra de semillas de papa

• Valor total estimado: 8 millones 650 mil dólares que se concretó en agosto de 2015.

La empresa Jenkins recibió un anticipo de 40% ($3.460.000) para el despacho de 3.700 toneladas de semillas; posteriormente, Agropatria transfirió un 30% adicional, ($2.595.000), con lo cual solo faltaba cancelar 30% ($2.595.000), para la entrega de la carga.