Luz verde para levantar la prohibición de plantar patata en siete concellos.

La Xunta de Galicia y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación acordaron ayer el levantamiento de la prohibición de plantar patata en siete de los 14 concellos de las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal afectados por la polilla guatemalteca de la patata –la decisión afecta también a los concellos de Ourol y Abadín en la provincia de Lugo–.

Se trata de los municipios de Ares, Mugardos , Cabanas, Fene, Ferrol, A Capela y As Pontes, donde no se ha detectado ninguna captura en este período, lo que hará que pasen de zona infectada a zona tampón.

Recuerdan que esto supone la posibilidad de plantar patata pero que se hará un seguimiento exhaustivo de las cosechas por parte de la Consellería de Medio Rural y se mantendrán las demás medidas de control y vigilancia previstas en la legislación.

Dentro de este cordón sanitario se encontraban hasta ahora los municipios de Moeche, As Somozas, Cerdido y Cedeira y parte de los de Pontedeume y Monfero.

El director xeral de Gandaría, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, José Balseiros, comunicó la decisión tras reunirse en Madrid con Valentín Almansa, director general de Sanidad de la Producción Agraria, en un encuentro de coordinación en el que también participaron responsables del gobierno del Principado de Asturias.

El Diario Oficial de Galicia (DOG) publicará en los próximos días una resolución para hacer efectivo el acuerdo.

Esta medida ya había sido evaluada y propuesta en la última reunión de la comisión de seguimiento de la polilla de la patata que tuvo lugar el pasado 11 de diciembre en Santiago.

En ella se constató una evolución muy positiva en la reducción de capturas en todos los municipios de la zona infectada y que en estos siete –nueve contando con los de la provincia lucense– no se registró ninguna en los últimos dos años, razón que permite levantar las restricciones, de forma que los citados concellos pasen a ser zona tampón.

La prohibición seguirá afectando a los concellos de Narón, Neda, San Sadurniño, Valdoviño, Cariño, Ortigueira y Mañón, donde las sanciones por saltarse el veto y plantar patatas pueden llegar a los 3.000 euros.