La pérdida del alimento podría ser minimizada mediante una agresiva campaña para estimular su consumo, la reactivación de las industrias de la papa y la utilización del producto como material de socorro para víctimas de calamidades.
En la actualidad, 313 almacenes frigoríficos de todo el país tienen cerca de 1.7 millones de toneladas de papa (17 lacs) en stock y de acuerdo con la relación de consumo normal, más o menos 0.7 millones de toneladas (7 lacs) podrían ser vendidas antes de noviembre, según fuentes autorizadas.