Cuba

La primera referencia a la papa en Cuba data de 1798, cuando un terrateniente se quejó de una escasez de papa de semilla adecuada. De hecho, la falta de variedades adaptadas al clima de las islas tropicales de Cuba desalentó a generaciones de agricultores de cultivar tubérculos.

Desde la década de 1970, la producción ha aumentado de manera constante gracias al uso de semilla de papa importada de Francia y los Países Bajos, la cual puede reproducirse localmente hasta por tres años consecutivos. La producción de papa en Cuba alcanzó un récord de 370 000 toneladas en el año 2000 y, desde entonces, las cosechas anuales han alcanzado un promedio de más de 300 000 toneladas.

Los rendimientos se han duplicado desde 1990 hasta hoy, la producción por hectárea supera la 24 toneladas, ubicándose entre los rendimientos más altos de América Latina y un 50 por ciento más alto que el promedio mundial. La producción se concentra en áreas alrededor de la capital, La Habana, y se utiliza principalmente para papas fritas. El consumo anual de papa per cápita es de alrededor de 30 kg. (Fuente: Año Internacional de la Papa)

En 2014 se cultivan aproximadamente 3200 hectáreas de papa en Cuba. Esto es un 57% más pequeño que el área total de 2013 y un 17% más pequeño que en 1990.