El cambio climático reducirá la producción total de patatas en Bélgica, los Países Bajos, Francia y Alemania entre un 7 y un 11 % a pesar del aumento de las hectáreas, según las últimas estimaciones de North-western European Potato Growers (NEPG).
NEPG: El cambio climático reducirá la producción total de patata en Bélgica, Países Bajos, Francia y Alemania entre un 7 y un 11 porciento a pesar del aumento de hectáreas
Durante su última reunión previa a Potato Europe 2022, North-western European Potato Growers (NEPG) estima que la producción total de papa en la zona NEPG (EU-04: Bélgica, Países Bajos, Francia y Alemania) se reducirá de 7 a 11 %.
La superficie final probable de la zona NEPG (EU-04) en 2022 será de 510.938 ha, un aumento del 3,2 % con respecto al año anterior y un aumento del 1,7 % con respecto a la media de 5 años. Los productores holandeses plantaron un 7,7 % ha más de patatas en comparación con 2021.
Dependiendo del crecimiento durante el resto de la temporada, la producción total debería terminar entre 20 y 21 millones de toneladas. Después de un verano largo, inusualmente seco y caluroso, la producción de patatas se ha reducido en toda la zona NEPG.
Las situaciones varían entre países y regiones, siendo los agricultores belgas y franceses los más afectados (una reducción de alrededor del 20 % para los agricultores belgas). Los holandeses se vieron mucho menos afectados, particularmente aquellos al norte de los grandes ríos donde se registraron más lluvias. Algunos agricultores no podrán cumplir con sus contratos esperados debido a los bajos rendimientos.
El verano de 2022 se registrará como un año difícil y muy costoso, no solo porque los rendimientos por hectárea son bajos, sino también porque los costos de energía y riego fueron mucho más altos. Las olas de calor que tuvimos durante el verano provocarán una serie de problemas de calidad y almacenamiento.
Hay informes de pesos subacuáticos demasiado altos (contenido de materia seca), tubérculos demasiado pequeños y aún más preocupante, un levantamiento de la latencia.
Incluso si la lluvia llega a mejores situaciones del suelo y condiciones de cosecha, las magulladuras podrían ser un problema durante el levantamiento.
La germinación temprana en los almacenes también hará que la próxima temporada de almacenamiento sea más difícil y costosa. La pérdida de peso y los niveles de desperdicio (debido, entre otras cosas, a los hematomas) probablemente serán mayores.
A diferencia de 2018-19, cuando se podían introducir patatas de otras partes de Europa (es decir, principalmente de Polonia), esta temporada no vendrán patatas de otros lugares, mientras que las necesidades de los procesadores han aumentado considerablemente en los últimos años.
¿Qué deberían plantar o sembrar los agricultores la próxima primavera?
Los precios de contrato actuales para la temporada 2022 - 2023 se firmaron a principios de año, sus precios eran aceptables, pero después de que comenzó la guerra y durante los últimos 6 meses, los costos de producción aumentaron drásticamente.
Los precios reales del contrato no cubren los costos adicionales que los agricultores han estado enfrentando y que deberán enfrentar en las próximas semanas y meses.
Con el mercado libre de compra estable en 25 EUR/100 kg (alrededor de 25,2 USD/100 kg) y las cotizaciones futuras del mercado para abril de 2023 no mucho más altas, los agricultores están muy preocupados por sus ingresos de papa. El aumento de los costos debe ser compartido por toda la cadena de la papa.
Con costes mucho más elevados (electricidad, gasóleo, fertilizantes...) y mayores riesgos vinculados al cambio climático y la guerra en Ucrania, algunos cultivadores de patatas se preguntan qué deberían plantar o sembrar en la primavera de 2023. Sin garantías por parte de los compradores, los productores de papa podrían terminar decidiendo plantar o sembrar más cultivos alternativos.
La superficie final probable de la zona NEPG (EU-04) en 2022 será de 510.938 ha, un aumento del 3,2 % con respecto al año anterior y un aumento del 1,7 % con respecto a la media de 5 años. Los productores holandeses plantaron un 7,7 % ha más de patatas en comparación con 2021.
Dependiendo del crecimiento durante el resto de la temporada, la producción total debería terminar entre 20 y 21 millones de toneladas. Después de un verano largo, inusualmente seco y caluroso, la producción de patatas se ha reducido en toda la zona NEPG.
Las situaciones varían entre países y regiones, siendo los agricultores belgas y franceses los más afectados (una reducción de alrededor del 20 % para los agricultores belgas). Los holandeses se vieron mucho menos afectados, particularmente aquellos al norte de los grandes ríos donde se registraron más lluvias. Algunos agricultores no podrán cumplir con sus contratos esperados debido a los bajos rendimientos.
El verano de 2022 se registrará como un año difícil y muy costoso, no solo porque los rendimientos por hectárea son bajos, sino también porque los costos de energía y riego fueron mucho más altos. Las olas de calor que tuvimos durante el verano provocarán una serie de problemas de calidad y almacenamiento.
Hay informes de pesos subacuáticos demasiado altos (contenido de materia seca), tubérculos demasiado pequeños y aún más preocupante, un levantamiento de la latencia.
Incluso si la lluvia llega a mejores situaciones del suelo y condiciones de cosecha, las magulladuras podrían ser un problema durante el levantamiento.
La germinación temprana en los almacenes también hará que la próxima temporada de almacenamiento sea más difícil y costosa. La pérdida de peso y los niveles de desperdicio (debido, entre otras cosas, a los hematomas) probablemente serán mayores.
A diferencia de 2018-19, cuando se podían introducir patatas de otras partes de Europa (es decir, principalmente de Polonia), esta temporada no vendrán patatas de otros lugares, mientras que las necesidades de los procesadores han aumentado considerablemente en los últimos años.
¿Qué deberían plantar o sembrar los agricultores la próxima primavera?
Los precios de contrato actuales para la temporada 2022 - 2023 se firmaron a principios de año, sus precios eran aceptables, pero después de que comenzó la guerra y durante los últimos 6 meses, los costos de producción aumentaron drásticamente.
Los precios reales del contrato no cubren los costos adicionales que los agricultores han estado enfrentando y que deberán enfrentar en las próximas semanas y meses.
Con el mercado libre de compra estable en 25 EUR/100 kg (alrededor de 25,2 USD/100 kg) y las cotizaciones futuras del mercado para abril de 2023 no mucho más altas, los agricultores están muy preocupados por sus ingresos de papa. El aumento de los costos debe ser compartido por toda la cadena de la papa.
Con costes mucho más elevados (electricidad, gasóleo, fertilizantes...) y mayores riesgos vinculados al cambio climático y la guerra en Ucrania, algunos cultivadores de patatas se preguntan qué deberían plantar o sembrar en la primavera de 2023. Sin garantías por parte de los compradores, los productores de papa podrían terminar decidiendo plantar o sembrar más cultivos alternativos.
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