Esta plaga conocida como paratrioza, se alimenta de las hojas y las flores de la papa y es transmisor de múltiples enfermedades, además en plantaciones de tomate y chile.
Su forma de trasladarse de un lugar a otro es por medio de la influencia de fuertes corrientes de viento.
El pequeño insecto deposita una toxina y transmite un fitoplasma a la planta que reduce la productividad.
Ante la preocupación de los productores de papa, el servicio fitosanitario del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), trabaja en medidas de prevención mediante un plan de acción del departamento de control y vigilancia de plagas.
Las autoridades del servicio, piden a los productores no entrar en pánico, y aseguran que mientras el insecto no llegue al país no declararán emergencia.
La forma de impedir el ataque de este insecto conocido también como pulgón saltador, es con barreras vivas y la aplicación en los cultivos de un antibrotante.
La plaga ya se encuentra presente en países como, Guatemala, México Honduras y El Salvador.